Tonky puede presumir de haber tocado con personajes míticos y entrañables de éste género, aportando con los limpios solos de sus Gibson, clase y calidad por doquier.
Fántastico con el cuello-de-botella "bottleneck", yo le he visto en directo ya en los años 80, tocar así hasta con un cenicero de cristal y aquello sonaba estupendamente bien.
Existen discos difíciles de encontrar pero no imposibles de encontrar que demuestran todo su potencial sin fisuras. No es nada nuevo, solo blues, pero de gran categoría y hecho con gran sinceridad y devoción.